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Mensaje 122 del Arcángel GABRIEL canalizado por Asriah el 12/05/2003

Así como todas sus células forman su cuerpo, todos los humanos unidos conforman el cuerpo de la humanidad.

 

 

La evolución de la conciencia es responsabilidad de cada uno.
La conciencia evolucionará en la Tierra en la medida en que vayan evolucionando todos los seres que aportan a la conciencia planetaria terrestre.
Ustedes conforman un ser, una unidad dentro de la totalidad, dentro del Uno.
Podemos hacer una analogía con sus cuerpos y su salud.
Si hay un órgano que está "enfermo", no pueden afirmar que tienen excelente salud. Por lo contrario dicen que están enfermos, aunque el resto de sus cuerpos "estén en estado saludable", por decirlo de algún modo.
Ustedes entienden claramente que la salud o la enfermedad, tienen que ver con la totalidad de lo que definen como su cuerpo.

De manera análoga, no podemos afirmar que la humanidad ha elevado su nivel de conciencia, mientras existan grupos o seres que no lo han hecho aún.
Existe un trabajo de crecimiento que es necesario realizar a nivel individual.
Y también una tarea equivalente que cada uno realiza como parte de la humanidad, aunque tambien lo hacen como hijos de la tierra, como seres del sistema solar, como integrantes de la familia de la galaxia.y así sucesivamente hasta abarcar la totalidad.

Así es como cada uno, cada ser, cada conciencia va aportando a la totalidad.
En cada uno de estos niveles hay subniveles de organización.
Así como los átomos forman tus moléculas, y estas tus células y de ahí tus tejidos, órganos,etc. hasta formar todo tu cuerpo.Éste a su vez forma parte del cuerpo de la humanidad.

Como es arriba es abajo
Como es abajo es arriba

Cada partícula o cada conciencia (son equivalentes), tiene la misma importancia en el crecimiento, aprendizaje y evolución del TODO
Asi, la evolución va resultando de un interjuego infinito cuyo desarrollo es un interrogante,
una sorpresa si prefieren así decirlo.
Sólo existe la certeza de un impulso o tendencia hacia la perfección, hacia el Amor Uno,
que subyace en cada partícula, y que está esperando despertar.

Como trabajadores de la luz han asumido la tarea de irradiar su luz, para, por empatía, despertar ese impulso divino en aquellas partículas que todavia duermen en su planeta.
Es una bella tarea la de encender faroles.
Sigan sin juicios ni preconceptos. Sabiendo que allí donde sienten que todo es oscuro, justamente allí, hay chispas de luz esperando ser despertadas. Y eso sólo ocurririrá, si son respetadas, valoradas, reconocidas y fundamentalmente amadas.

Recuerden, así como todas sus células forman su cuerpo, todos los humanos conforman el cuerpo de la humanidad. Están todos profundamente ligados.
A medida que cada uno logre hacer brillar su luz, es importante que ponga la intención de despertar con ella a otras luces humanas, hasta que logren crear una enorme luz, la luz de la humanidad.

 

Somos Uno con ustedes

GABRIEL