La Luz sea con ustedes en la Tierra.
Hemos hablado de temas de la física. Ustedes piden explicaciones, pero esa no es la forma en la que el verdadero conocimiento se adquiere.

Cada ser tiene dentro de sí la comprensión total de lo que el Universo es y de cómo funciona.

Según su grado de evolución o conciencia, van tomando contacto con el conocimiento que pueden percibir desde esa posibilidad de interacción con el Universo que su conciencia determina.
En los diversos niveles de conciencia se ve la realidad o el Universo desde ciertas limitaciones particulares. De acuerdo con esas limitaciones se capta el conocimiento.
Eso es experimentar al Universo desde diferentes ángulos. Sólo puede hacerse velando parte de la verdad o del conocimiento. Es así la aventura de la conciencia.
Se autolimita para experimentar posibilidades y ángulos diferentes, y así crece, se enriquece y evoluciona el todo junto con la evolución de cada partícula.
Es una aventura gozosa ¿lo sienten?
Es como su búsqueda de emoción en juegos, parques de diversiones, películas, etc...
¿Qué es lo que hacen?
Buscan situaciones no frecuentes o no habituales, buscan ponerse en la piel de otros y experimentan.
Siempre, aunque jueguen al mismo juego, al hacerlo están en la búsqueda de algo nuevo: una emoción, un sentimiento, hasta una cantidad de dinero que nunca tuvieron.
Todo en el Universo funciona de la misma manera, pero se recrea infinitamente.
También es un estímulo el aprender o comprender cosas nuevas con la mente. También es una forma de juego.
Lo que les digo es que a medida que evolucionen tendrán la posibilidad de experimentar ese conocimiento de una manera total.
Desde todo el ser, no solamente desde la mente y lograrán la verdadera comprensión.
El comprender desde la mente abre la posibilidad de la comprensión total, pues es una forma de atraer esa comprensión y de crecer. Sin embargo aquel que no tiene una mente desarrollada llegará a ese conocimiento desde otros lugares.
Todo lo tienen dentro.
Busquen y aprendan como niños de manera relajada y gozosa.
No se desesperen por saber, ya saben.
Son uno con el todo.
Sólo que hoy, ahora, han elegido un ángulo para observar que no les permite ver la totalidad. Es así de simple.